El establecimiento, adherido a Ley Cenabast, ofrece precios más convenientes para el consumidor final, así como también, amplía la oferta de medicamentos, bioequivalentes, con recetas médicas y de manera fraccionada.
Además, facilita el acceso al servicio de telemedicina, a un costo accesible y con un servicio de calidad para todos y todas.
Más de 3.500 medicamentos disponibles tiene la primera farmacia integral de María Elena, favoreciendo a miles de personas que para tener atenciones médicas y comprar sus remedios tenían que desplazarse a Tocopilla,
Calama u otras ciudades de la región y el país.
Este nuevo establecimiento elenino, que está ubicado a un costado del Centro de Salud Familiar (Cesfam) de la comuna, permite la compra directa con todo medio de pago y también el retiro de medicamentos que
se hayan adquirido vía web, facilitando también los medios para agendar horas de telemedicina con diferentes especialistas.
La participación de Farmacia Fracción, permite comprar medicamentos de manera porcionada, para lo cual se puede adquirir la dosis justa en la receta médica, disminuyendo el gasto. Mismo beneficio que entrega
la regulación del precio de venta a través de la ley Cenabast, en la cual se faculta a la Central Nacional de Abastecimiento para intermediar la compra entre farmacias independientes y laboratorios,
logrando precios más económicos para los usuarios y usuarias finales.
Diálogo y participación
Este proyecto, financiado y ejecutado por Minera Antucoya, en alianza estratégica con la Municipalidad de María Elena, Fundación Chile y Farmacia Fracción, es uno de los siete implementados en el marco
de la tercera versión del programa Diálogos para el Desarrollo y en línea con el programa EnRed de Antofagasta Minerals, que busca articular soluciones público-privadas para incorporar tecnología a las iniciativas de inversión social.
Miriam Araya, presidenta del Taller de Autoayuda La Esperanza de María Elena, organización impulsora de la iniciativa, valoró su concreción. “Este es un gran logro que lo hicimos en comunidad, con los que votamos por esta idea,
y es lo mejor que nos ha podido pasar en María Elena. Lo más importante es que perdure en el tiempo”. Similar opinión tuvo Gloria Cortés, vecina participante del taller.
“Va a ser muy beneficioso para todos los vecinos de la comunidad de María Elena, que lo necesitábamos mucho y le damos las gracias a Minera Antucoya”.
En ese contexto, el cronograma 2021-2022 de Diálogos para el Desarrollo contempla la ejecución de siete iniciativas que en procesos de diálogos abiertos y participativos fueron priorizadas por la comunidad y que se
enmarcan en cinco pilares: educación, salud, seguridad, reactivación económica y conectividad. Aquellas líneas de trabajo están por cerrarse en diciembre, para comenzar un nuevo proceso en 2023.
